Venid, aclamemos alegremente a Jehová; Cantemos con júbilo a la roca de nuestra salvación. Lleguemos ante su presencia con alabanza; Aclamémosle con cánticos. Porque Jehová es Dios grande, Y Rey grande sobre todos los dioses.
Salmos 95:1-3
Buenos días y bendiciones para todos. Hoy quiero compartir con ustedes una invitación de parte del Señor.
¿Cuántas veces hemos recibido invitaciones importantes de esas que nos parecen chéveres pero que nos ponen a pensar y a veces a dudar porque, aunque queremos asistir, sentimos que no tenemos el atuendo adecuado?
Pues estoy segura de que, aunque aquellas hayan sido especiales, esta que nos ofrece el pasaje bíblico es una de las más maravillosas. Dios, el Rey de cielos y tierra, nos hace un llamado a que nos acerquemos a su presencia y nos alegramos con Él cantando con júbilo, es decir con total euforia para celebrar lo que Él es.
Sabemos que acercarnos a Él implica muchas cosas, por ejemplo, que nos hayamos desvestido del trapo de inmundicia y vestido con su manto de santidad, pero cualquier esfuerzo vale la pena porque en su presencia es el único lugar donde encontramos plenitud de gozo.
Estar pleno es no necesitar nada más porque ya lo tienes todo.
Aquellas otras invitaciones tal vez nos generen gozo, pero nunca será duradero. Solo en la presencia de Dios somos completos.
Oración.
Hoy te invito a que con gozo eleves conmigo esta corta oración.
Dios y Padre nuestro, estoy agradecido contigo por tu eterno amor y tu bondad al abrir camino para que habite en tu presencia y a tu lado sienta completo gozo. Te pido que me ayudes en este día a mantenerme cerca de ti para adorar. ¡Amén!
¡Feliz día!
Así es la mejor invitación que hemos recibido en la vida es poder acercarnos al Señor y no solo eso sino disfrutar de su presencia que hermosos es nuestro Dios, siempre ofreciéndonos lo mejor aunque no nos sintamos dignos, él quiere que usted y yo disfrutemos de sus bendiciones en gloria amén.